Investigadoras crean champú 100% natural para perros con pelo blanco
Con una fórmula totalmente natural, donde los principales componentes son el azul de mata y el romero, el champú para perros ideado por las investigadoras Mónica Hidalgo y Mercedes Arévalo es ideal para canes de pelaje blanco, además de ser una opción de bajo costo y amigable con el ambiente.
Esta innovadora propuesta nació de un proyecto de trabajo comunal universitario (TCU) de la Universidad de Costa Rica (UCR). En su afán por implementar el uso de plantas medicinales en el Hogar para Ancianos Alfredo y Delia González Flores, Arévalo creó un champú —en principio para uso humano— con el objetivo de generar recursos para las personas adultas mayores a la vez que estas cultivaban las plantas en conjunto con los estudiantes.
Según Hidalgo, posterior a ese TCU, se realizaron modificaciones en la fórmula para que el champú fuera utilizado en perros blancos, esto en vista de que se utiliza la planta conocida como azul de mata (Justicia tinctoria) y resulta que esta potencializa este color en el pelaje de los canes.
El champú está listo para salir a la venta, lo único que se necesita es establecer una alianza con una empresa para proceder con la licencia de comercialización. “Cualquier persona o empresa que desee adquirir la licencia para colocar el producto en el mercado puede contactar con nosotros en Proinnova para solicitar información. Pueden escribir al correo electrónico: mauricio.villegas@ucr.ac.cr”, detalló Mauricio Villegas, gestor de innovación en Proinnova.
Se busca aliado
Este champú está protegido por secreto industrial que, según Villegas, “es una forma de propiedad intelectual que sirve para proteger información que tiene valor por el hecho de ser o mantenerse confidencial”. En este caso, la confidencialidad recae en la fórmula y las condiciones específicas del procedimiento exacto para la producción.
Para que una empresa pueda utilizar esa fórmula con fines comerciales, entonces, lo que procede es hacer un contrato de licencia para autorizarla. “Un contrato de licencia es el mecanismo legal mediante el cual se autoriza el uso de una propiedad intelectual”, señaló Villegas.
“Nos referimos entonces a que la Universidad, a través de Proinnova, está dispuesta a negociar y firmar un contrato de licencia sobre esta tecnología. Dicho contrato se negociaría y redactaría en su momento, ya que depende de factores como: si es a un particular, un emprendimiento, una Pyme, una empresa transnacional, el potencial de mercado (nacional e internacional) que tiene el producto a través de esa licencia o si el licenciatario necesita apoyo de los investigadores para implementar la tecnología, entre otros múltiples factores”, continuó el gestor de innovación.
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