La papaya “Pococí” cumple 16 años
Este híbrido salió al mercado en el 2004 gracias a una alianza entre el INTA y la UCR. Actualmente, casi el 100% de la producción de papaya local es de este tipo.
En el 2004 se introdujo la papaya “Pococí” al mercado local costarricense y su éxito con los años fue tanto que ahora es conocida como la papaya “Perfecta”. (Fotografía: Cortesía ODI).
En este 2020 se cumplen 16 años de la introducción de la papaya “Pococí” al mercado nacional, más conocida como la “Papaya “Perfecta”; nombre popularizado por la cadena de supermercados Más X Menos.
La obtención de esta variedad se logró gracias al esfuerzo y la colaboración entre la Universidad de Costa Rica y el Instituto Nacional de Innovación y Transferencia en Tecnología Agropecuaria (INTA), quienes mantienen un convenio para el desarrollo de variedades de papaya desde 1999.
La introducción de este híbrido al mercado costarricense en al año 2004 marcó el inicio de un proceso de reconversión de las variedades de papaya en nuestro sector agrícola.
En el 2007 había más de 100 hectáreas con siembros de este producto en el país, cantidad que fue creciendo de forma lineal hasta llegar a las 1000 hectáreas en el año 2018. En la actualidad, casi el 100% de la fruta de papaya que se produce y comercializa en el mercado local corresponde al híbrido “Pococí”.
El éxito de este material puede atribuirse a varios aspectos. Desde el punto de vista del consumidor, la fruta tiene un sabor bastante agradable; ligeramente perfumado y dulce. Por otra parte, desde el punto de vista de cultivo, es un material altamente productivo debido a la selección genética realizada durante su desarrollo, la cual tomó en cuenta aspectos de estabilidad fisiológica de su floración bajo diversas condiciones ambientales.
Como en muchos otros casos de innovación, el éxito de la variedad no fue inmediato; al contrario, durante los primeros años, la acogida por parte de algunos productores fue más bien fría.
Fueron los productores que vendían la fruta en las “ferias del agricultor” quienes primero percibieron las ventajas comerciales, ya que por el contacto directo con los consumidores se dieron cuenta de que estos preferían el sabor de la fruta por encima de las variedades tradicionales.
La siguiente fase se dio cuando se estableció una alianza de la cadena de supermercados Más X Menos con un grupo organizado de productores de la región de Guácimo, quienes, en conjunto, lograron colocar la fruta en dichos supermercados. Este paso fue crucial para dar a conocer el nuevo material, y lograron posicionarlo en el mercado a gran escala.
Fue tal el éxito en estos supermercados, que la empresa acuñó el término de “Papaya Perfecta” para su venta, nombre con el cual la mayoría de las personas conoce esta variedad actualmente.
Muchos han sido los intentos de exportación de la papaya “Pococí”, con diversos grados de éxito. Hasta la fecha, la exportación de esta fruta ha generado ingresos cercanos a los $30 millones al país. Sin embargo, los esfuerzos para posicionar esta fruta en el mercado internacional de manera continua y estable aún no han dado los resultados deseados.
Algunos de los problemas enfrentados se deben a la fragilidad que caracteriza la fruta de papaya, cuya vida poscosecha es menor a la de otras especies frutales comunes. Aunado a ello, la fruta de la papaya es susceptible a enfermedades de difícil control, especialmente en condiciones adversas durante las épocas de mayor precipitación.
El personal del convenio de mejoramiento de papaya UCR-INTA continúa trabajando en el desarrollo de las nuevas variedades, las cuales se esperan que sustituyan al híbrido “Pococí” en un futuro cercano.
El desarrollo de variedades de papaya es un proceso extremadamente lento, que puede durar hasta 20 años desde la realización de los cruzamientos iniciales hasta la liberación de una variedad significativamente superior.
Algunas de las características que diferencian las nuevas variedades experimentales de la “Pococí” son una mejor resistencia a enfermedades de la fruta y un mejor sabor. También se buscan variedades de diferentes tamaños de fruta acorde con los diferentes nichos de mercado local e internacional.
Todo el equipo de trabajo de este convenio UCR-INTA continúa laborando en la producción de semilla, aún en medio de la pandemia por el COVID-19. La producción de semilla no puede detenerse, pues cientos de familias costarricenses trabajan arduamente todos los días para llevar esta fruta a la mesa de los consumidores, quienes han hecho de esta papaya una parte integral de su dieta diaria.
Sobre el autor:
El MSc. Eric Mora Newcomer obtuvo su maestría en el Programa de Ciencias Agrícolas y Recursos Naturales de la Universidad de Costa Rica, con un énfasis en Biotecnología. Trabaja desde el año 1996 en la Estación Experimental Agrícola “Fabio Baudrit Moreno”, de la Facultad de Ciencias Agroalimentarias, principalmente en el área de mejoramiento genético y fisiología de especies frutales tropicales. También imparte docencia para la Escuela de Agronomía en el área de la fruticultura.